El carpintero Gregorio Martínez Castillo, cayó agonizando y arrojando sangre por la boca, donde nada pudieron hacer socorristas de la Cruz Roja que llegaron, todo había sido muy rápido, además de que era un padecimiento crónico que tenía el ahora occiso.
La señora Magdalena Martínez de Jesús, de 43 años de edad, domiciliada en Huitzila de Soledad Atzompan, triste y desesperada por los hechos, aseguró que su padre, el ahora
occiso Gregorio Martínez Castillo de 62 años de edad, de oficio carpintero, padecía de un mal crónico.
Por lo que minutos antes, comenzó a toser mucho, se salió al patio donde arrojó sangre y después cayó fulminado al suelo, de donde ya no se levantó.
Los paramédicos de la Cruz Roja llegaron y lo auxiliaron, pero dijeron que ya estaba muerto, nada podían hacer.
La hija aseguró que fue un hecho que jamás esperaba, por lo que autoridades de Investigadores tomaron conocimiento, donde se detalló que el ahora occiso tenía su domicilio en la calle José María Morelos sin número de la colonia Libertad, en la ciudad de Nogales, Veracruz.
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