Ciudad de México.- Típico que un día como hoy nos encontramos celebrando al amor y lo bien que van nuestras relaciones sentimentales, bien sea con amigos, familia o pareja del momento. Pero no todos ven la vida color de rosa y utilizan la puerta falsa para dejar la vida.
El suicidio es una de las principales causas de muerte en la población mexicana, detrás del cáncer, la diabetes o los problemas cardíacos, esto según datos recopilados por el Instituto Nacional de Geografía y Estadística (INEGI). Y una de las soluciones más prácticas para acabar con una vida de sufrimiento.
¿Quién se suicida y cuándo? En los estados costeros como Coahuila, Campeche o Baja California, los casos más frecuentes son hombres jóvenes y en los meses más calurosos del año, junio y julio. Y la causa más común es que estas personas están profundamente afectadas por la sensación de vacío en sus vidas.
Por lo general, los que logran salir por la puerta de atrás, han sido afectados por un divorcio o porque el “amor de sus vidas” los deja tristes.
Pero el problema no es un problema que se reduce a varios estados: todos los estados de la República están permanentemente en alerta pero no cuentan con el equipo necesario para dar atención a la cantidad creciente de personas en estado depresivo.
De hecho, sólo en la Ciudad de México hay un hospital especializado en tratar problemas emocionales, en el cual las consultas son gratuitas y hay una lista de espera de 400 personas a principios de 2017, año en el que se registran más suicidios desde 2011.
Por ejemplo, uno de los suicidios más recientes de los que nos enteramos en la redacción fue el de una mujer que imitó a Virginia Woolf y se lanzó al Río Pánuco porque su novio ya estaba en una relación fructífera con otra mujer.
Otra niña de 17 años se colgó de un rebozo al tener una pelea de causa mayor con su pareja del momento. Aunque, al momento del suicidio, los padres desconocían la causa real detrás de esa decisión. Porque no dejó ninguna nota que explicase lo sucedido.
Un joven se colgó del techo del baño el año pasado, sólo para demostrarle a su novia que sí podía morir por ella. Y es que estaban celebrando con sus tíos y que ella al retirarse a dormir, le cortó la fiesta al chavo en cuestión.
Como estos casos ya reportados, hay muchos. Y muchos más que lo intentan y sobreviven. Ya que de cada 10 casos de "éxito" hay 2 que fallan y conservan la vida.
Información de Vanguardia, Diario de Chihuahua, Letra Roja y El Sol de México
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